¿supermodelos?

Naomi Campbell, Linda Evangelista, Tatiana, Christy Turlington y Cindy Crawford por Peter Lindbergh para Vogue UK.

Mailye Matos

Hablemos de uno de mis temas preferidos: Supermodelos. Ustedes las conocen; esas extrañas criaturas que cumplen con el incomprensible e inalcanzable estándar de belleza de nuestra sociedad. Criaturas que nos recuerdan que un par de piernas largas, unos labios de recién nacido, suficiente separación entre los dientes o hasta cejas inexistentes son capaces de generar cantidades ridículas de dinero.

Janice Dickinson, ese personaje que quizás llegó a tu televisor con las primeras temporadas de America's Next Top Model, fue según ella  y la cultura popular, la primera supermodelo. Desde entonces han sido numerosos los nombres que han servido como musas para los mas grandes diseñadores y que generando dinero por algunas cualidades físicas que las distinguen, pavimentaron el camino para las nuevas generaciones.

Muchos coinciden en que el término se popularizó con la tropa de los años 90: Naomi Campbell, Linda Evangelista, Cristy Turlington, Claudia Schiffer y Cindy Crawford. Dominaban las campañas publicitarias y las pasarelas y todas tenían alguna cualidad que las hacía únicas ante los ojos del mundo.

En la actualidad el término es utilizado para describir a una nueva tropa: las hermanas Hadid, Kendall Jenner, Iman Hamman y la lista continúa. Chicas que al igual que aquellas que las precedieron agracian las páginas de las revistas mundiales y las más importantes campañas publicitarias. Pero, ¿qué define a una supermodelo?

Para algunos, esta pregunta requiere una respuesta sencilla; el factor cool, la estatura, el caminar; para otros el asunto es más complejo, pero si de supermodelos se trata, la capacidad transformativa es un factor importantísimo a considerar, si no, no habría todo un episodio dedicado a la transformación en ANTM. La personalidad también es un factor importante. 

Durante la década del 90 Linda Evangelista se coronó reina de la transformación si de belleza estamos hablando: llevó el cabello al estilo bob, lob, pixie, rojo intenso, rubio platinado, castaño oscuro y negro.

Linda Evangelista por Irving Penn para Vogue, febrero de 1992.

Si de personalidad se trata, podemos tomar como ejemplo a Naomi Campbell, por muchos considerada la reina de la pasarela.

La modelo, nunca exenta de controversia, se ha coronado como la reina de la pasarela gracias a su caminar. Al igual que las tops de los 90 ha estado en las páginas de las revistas más importantes y es uno de los nombres más conocidos dentro del mundo de la moda. Recientemente protagonizó otra polémica por cuestionar si las modelos actuales merecen llevar el prefijo súper, ¿realmente lo merecen?

Aunque este trabajo requiere de personalidad y capacidad transformativa, manejar los medios de comunicación es un must, asunto en el que la nueva generación podría llevar ventaja con las redes sociales y los realities (Kendall Jenner creció en televisión) pero no olvidemos que en algún momento existió Cindy Crawford.

La supermodelo, anfitriona del programa de MTV House of Style, demostró a lo largo de la década en que reinó en la pasarela, que también tenía capacidad mediática. No solo fue House of Style, también le dio a Pepsi lo que podría catalogarse como una de las campañas publicitarias más icónicas de todos los tiempos.

Linda, Claudia, Naomi, Cindy... todas marcaron una época, impregnaron la pasarela de personalidad pero en un trabajo en el que hoy estás in y mañana out lo cierto es que siempre existirá quién te reemplace y son muchas las que hemos visto desde entonces. 

Tal es el caso de Kaia Gerber, hija de Cindy Crawford, a quién el portal models.com declaró ganadora del Fashion Week  en septiembre pasado cuando abrió los desfiles de Alexander Wang, Fendi, Moschino, Isabel Marant y Chanel. Este año abrió el desfile de Sacai y caminó los desfiles de Chanel, Miu Miu, Valentino, entre otros y obtuvo las campañas de Daisy de Marc Jacobs, Valentino, YSL además de la más reciente portada de la revista i-D.

Kaia es una estrella en ascenso pero no olvidemos que también contamos chicas como las hermanas Hadid y Kendall Jenner que junto a otras forman la nueva generación de supermodelos. Tal y como aquellas que les precedieron y pavimentaron el camino que las llevó a donde están, estas chicas son rebeldes, salen con famosos bad boys (Stephanie Seymour anyone?) y acaparan la atención de los paparazzi.

Analicemos a las hermanas Hadid. Altura, abdomen plano, parejas famosas. Bella constituyó el Reader's Choice para Model of the Year en los Model of the Year Awards de models.com. Entre las campañas que obtuvo, están las de Dior, específicamente para el Lacquer Plump, Bulgari, DSquared, Rag & Bone y sus portadas más recientes fueron para la Vogue japonesa y la revista IO Donna. Por su parte Gigi obtuvo las campañas de Reebok, Valentino entre otras.

Luego está Kendall Jenner, modelo que obtuvo campañas para Tod's, Estee Lauder, Missoni y Calvin Klein así como las portadas de Vogue Korea y la Vogue Norteamericana. Lo que tienen en común estas cuatro, es que se saltaron fácilmente varios pasos en la escalada al estrellato por razones que todos conocemos. Gozamos de otras chicas con talento, Adwoah Aboah e Imaan Hammam por ejemplo. Otras pusieron mucho esfuerzo, Joan Smalls vivió con una tía en Queens, N.Y. mientras despertaba a diario para visitar agencias con el fin de obtener su primera oportunidad.

Hablamos de chicas que gozan de tal atención mediática que como casi todo en la industria en años recientes, es difícil establecer la línea entre el esfuerzo genuino y el número de followers, entre el verdadero talento u otra treta del posmodernismo. Lejos están los años de las reinas de la personalidad, pero no hay razón para creer que no volverán.

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